Adela. Los dones se heredan.

Adela, era mi tía, con ella conocí el dulce de higo casero mas rico que probé en mi vida. A mi tía Adela o mas conocida como "Bichi" le gustaba cocinar, heredó el don de su madre, mi abuela Ana Josefa.

Ana Josefa, según cuentan, era muy buena cocinera y supo ganarse el sustento siendo muy joven con este oficio. Transmitió sus conocimientos a sus tres hijas mujeres, entre ellas mi madre. Pero el Don le toco a Adela.

Adela se lo transmitió a Carmela, su nieta, quien hoy en día hace honor a sus generaciones pasadas que como ella, hicieron de la cocina un modo de vida.

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